Hemos conocido estos días la noticia de la designación del nuevo Capataz de la cuadrilla de Nuestra Señora de los Desamparados. Ha recaído sobre mi hermano Manuel Vicente Barranco. Reconozco que no sé mucho de costaleros y de formas de andar y demás. Más bien no sé casi nada. Por mi afición a la fotografía lo que espero es que el paso arríe para poder captar una buena instantánea, y cuando el capataz llama con el martillo, recojo mis bártulos y sigo camino hasta que termine la chicotá; y vuelta a empezar.
Pero creo que la Hermandad de Pasión ha dejado dos de sus joyas más preciadas, la imagen de Álvarez Duarte y su paso de palio, en las mejores manos. He visto a Manolo tantos años al frente del palio romántico de Almería... conduciendo a la dulzura misma por las calles de la ciudad. No podía ser otro. Felicidades a la Hermandad de Pasión por el acierto de esta decisión y... ¡suerte, Capataz¡
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